Diplomas de acreditación y diplomas de acreditación avanzada

La Ley de ordenación de las profesiones sanitarias regula en su artículo 36 los Diplomas de Acreditación (DA) y los Diplomas de Acreditación Avanzada (DAA). Son un instrumento para certificar el nivel de formación alcanzado por un profesional dentro de una profesión o especialidad teniendo en cuenta las actividades de formación continuada acreditada desarrolladas en un área funcional específica. 

Se trata de una credencial que valida que el profesional sanitario ha alcanzado competencias y requisitos de formación continuada, en el caso del DA, y avanzadas en el caso de la DAA. En ningún caso son incompatibles con las especialidades, sino totalmente complementarias. 

Estos nuevos roles responden a la creciente demanda de cuidados en campos muy concretos que normalmente tienen que ver con altas necesidades de tecnificación. 

Desde SATSE apostamos, junto con las especialidades enfermeras, por el desarrollo de los Diplomas de Acreditación y de Acreditación Avanzada, como forma complementaria de reconocer la práctica avanzada en determinadas áreas de las enfermeras y fisioterapeutas en diferentes ámbitos. 

Esfuerzo formativo

Con la regulación de estos títulos, se reconoce el esfuerzo formativo de los profesionales sanitarios, se aporta seguridad jurídica, se incrementa la seguridad del paciente y se mejoran las competencias profesionales. Además, los diplomas permiten cubrir las necesidades de mejora de los cuidados en áreas funcionales específicas.

SATSE defiende que la realidad de la práctica sanitaria demanda en algunos casos la tenencia a priori de un Diploma de Acreditación, pero no es así en todos los casos.

Los Diplomas de Acreditación y los Diplomas de Acreditación Avanzada son por tanto un instrumento para que la capacitación, conocimientos y experiencia del profesional sean reconocidos y valorados por las administraciones y organizaciones sanitarias a la hora, por ejemplo, de acceder a un puesto de trabajo, pero en ningún caso constituyen una exigencia general en el ejercicio profesional de las enfermeras y fisioterapeutas. 

Largo periodo normativo

El desarrollo normativo de estos diplomas ha sido muy lento, y repetidamente desde SATSE hemos instado al Gobierno a imprimir mayor celeridad en un área de desarrollo de las profesiones sanitarias que además está dirigida a mejorar la calidad del Sistema Nacional de Salud (SNS). 

Desde que se aprobó la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias en 2001, han tenido que pasar 14 años para contar con una norma que desarrollara el procedimiento de regulación de estas certificaciones.

Se trata del Real Decreto 639/2015, de 10 de julio, que es la norma que regula estas acreditaciones tanto en los servicios sanitarios públicos como privados.

Estos diplomas, según el RD, tienen una vigencia de cinco años. No obstante, la Comisión de Recursos Humanos del Sistema Nacional de Salud, previo informe de la Comisión de Formación Continuada del Sistema Nacional de Salud, pueden incluir en la propuesta de creación de un Diploma una vigencia inferior en atención a las características del área funcional.

Prestigio profesional

Acreditan, en definitiva, nuestro prestigio profesional y el grado de excelencia alcanzado dentro de la profesión. Se trata, además, de la forma que nos debe permitir acreditarnos como enfermeras de práctica avanzada. Un perfil profesional que desde SATSE venimos demandando que sea regulado en nuestro país. 

En otros países, como EEUU. o Canadá está ya arraigado con resultados muy notables. Resulta necesario diseñar en nuestro sistema sanitario el itinerario que, en base a la experiencia y formación acreditada, posibilite trabajar como enfermera de práctica avanzada. 

Requisitos para obtener los DA

En el caso de los diplomas de acreditación, los requisitos para su obtención son:

• Tener un mínimo de dos años de práctica profesional en las tareas objeto de certificación (en los últimos 10 años), con evaluación positiva de la institución sanitaria o sociedad científica correspondiente.
• Formación acreditada en los últimos cinco años en las competencias definidas.
• Otras evidencias que determine cada comunidad autónoma.

Requisitos para los DAA

Para los diplomas de acreditación avanzada, el Ministerio de Sanidad establece como requisitos indispensables:

• Mínimo de tres años de práctica profesional con Diploma de Acreditación en los últimos cinco años y con evaluación positiva del centro, o experiencia en el conjunto de tareas objeto de acreditación avanzada en caso de no existir diploma de acreditación.
• Acciones formativas acreditadas en los últimos cinco años.
• Otras evidencias según determine cada autonomía.

La normativa eliminó la limitación que establecía como requisito la tenencia previa de un Diploma de Acreditación para el acceso a un Diploma de Acreditación Avanzada.

Área funcional de paliativos

Hasta el momento, sólo se han desarrollado los diplomas de acreditación y acreditación avanzada de Paliativos. Se regulan en la Orden SND/1427/2023, de 26 de diciembre, por la que se publican las bases para la creación de Diplomas de Acreditación en el Área Funcional de Paliativos.

El Área Funcional de Paliativos se refiere al cuidado y atención del paciente de cualquier edad que se encuentra al final de la vida por enfermedades en situación activa, avanzada, progresiva, sin previsión de curación, y que cuentan con un elevado nivel de complejidad en su abordaje.

Estos diplomas son esenciales para validar la formación y garantizar una atención profesional, además de impulsar el desarrollo dentro del campo de los cuidados paliativos. Favorecen la estandarización del cuidado y mejoran la efectividad de las intervenciones. Además, son reflejo del aprendizaje constante en esta área, y aseguran alinearse a las mejores prácticas y evidencia científica reciente. 

Facilitan también el reconocimiento laboral como experta en este área, aumentando la influencia y liderazgo en el equipo de salud. 

Atención integral

Las bases de la actuación que se definen en la orden regulatoria son la atención integral al paciente y el establecimiento de medidas de soporte y confort dirigidas a la promoción de la máxima calidad de vida posible y que alivien y refuercen su dignidad humana. 

Se trata de elementos indispensables para un adecuado control de síntomas y dotan a las profesionales de habilidades de comunicación y relación de ayuda. Atender de forma integral, supone valorar, comprender y tratar al paciente con un enfoque holístico que abarque todas las esferas: física, psicológica, social, funcional y espiritual. Además, esta actuación debe incluir al entorno familiar del paciente, con especial atención a la figura del cuidador.

Todos los aspectos mencionados conducen a la complejidad inherente a las situaciones que los profesionales que realizan la atención paliativa deben afrontar, y que requieren un nivel de sensibilidad, experiencia y excelencia que sólo son posibles a través de la formación pertinente. Por tanto, los cuidados paliativos deben ser proporcionados por equipos interprofesionales y multidisciplinares capaces de dar respuesta a estos requisitos.

Características en la atención paliativa

La atención paliativa debe por tanto estar relacionada con otras características:

• Manejo experto de los dilemas bioéticos aplicados al final de la vida.
• Facilitación del establecimiento de medidas paliativas, en todo paciente que lo precise, por parte de los diferentes profesionales que lo estén atendiendo.
• Adecuar el esfuerzo terapéutico en pacientes en situación avanzada de enfermedad.
• Gestión de casos orientada a garantizar los recursos precisos para la adecuada paliación de la situación de los pacientes.
• Promoción de actividades de formación, docencia e investigación que permitan la progresión y mejora de la profesión.
• Manejo experto de habilidades de comunicación y de relación de ayuda.
• Manejo experto de todos los factores que influyen en la percepción de sufrimiento por parte del paciente y familia.

Para poder acceder a estos diplomas, los profesionales cuentan con la vía excepcional y la vía ordinaria, tal y como regula el Real Real Decreto 639/2015, de 10 de julio.

Nuevos roles avanzados

Para SATSE, estos roles requieren un claro y homogéneo desarrollo en todo el Estado. Defendemos la necesidad de implementar un itinerario profesional que, en base a la experiencia y formación acreditada, posibilite trabajar como enfermera de práctica avanzada tras obtener un Diploma de Acreditación o Acreditación Avanzada homologable en todo el Sistema Nacional de Salud.

Es prioritaria la integración de la práctica avanzada en el marco profesional y laboral de las enfermeras y enfermeras especialistas de nuestro país desde la convivencia y el respeto entre todos los actores.