Nuestras ‘líneas rojas’ en la negociación sobre la reclasificación profesional de enfermeras y fisioterapeutas

Las negociaciones con el Ministerio de Sanidad para actualizar el Estatuto Marco del personal estatutario de los servicios de salud siguen “en suspenso” desde el pasado mes de junio. 

Entre los asuntos aún pendientes de acordar con la organizaciones presentes en el Ámbito de Negociación destaca la demanda de SATSE de propiciar la reclasificación profesional de enfermeras y fisioterapeutas dentro de la administración pública

Desde hace 17 años, enfermeras y fisioterapeutas permanecen en el subgrupo A2 cuando tienen los mismos 240 créditos ECTS que otras titulaciones que, sin embargo, han sido encuadradas en el subgrupo A1. 

Esta clasificación supone una discriminación injusta y arbitraria hacia ambos colectivos profesionales, además de otros trabajadores públicos.

Líneas rojas

De cara a la negociación con el Ministerio de Sanidad, que se prevé que se reanude en próximos días, el Sindicato defenderá que se apruebe una clasificación profesional justa para enfermeras y fisioterapeutas que les permita acceder a puestos de dirección de alto nivel y gestión o a grupos de investigación o docencia.

Otra “línea roja” para SATSE es que conlleve el incremento salarial correspondiente. El Sindicato no podría admitir que la reclasificación profesional solo supusiera una mejora retributiva para determinados grupos de clasificación y no para enfermeras y fisioterapeutas. Sería una “discriminación inaceptable”.

EBEP

La reivindicación de SATSE por una nueva clasificación profesional se basa en considerar que la clasificación actual del Estatuto Básico del Empleado público (EBEP), en su artículo 76, no respeta la nueva estructura de las titulaciones universitarias implantada tras el proceso de Bolonia. 

El artículo establece una división del Grupo A, en dos subgrupos, A1 y A2. Esto no es acorde al actual esquema de titulaciones universitarias equiparadas a Grado, sino a la antigua diferenciación entre las titulaciones universitarias de licenciado y diplomado.

Esta situación provoca una brecha laboral, que limita las oportunidades de crecimiento profesional de enfermeras y fisioterapeutas, así como el acceso a puestos de liderazgo y un reconocimiento salarial justo.

También contribuye a agrandar la brecha de género. Ambas profesiones. mayoritariamente femeninas, cuenta con una formación universitaria, solvente y equiparada en créditos a otras disciplinas del sector (Física, Química, Biología…). 

Acciones

SATSE no solo ha llevado esta reclamación a todos los ámbitos y foros de negociación sino que ha impulsado distintas movilizaciones en las comunidades autónomas y también a nivel estatal. La última de ellas fue la concentración realizada el pasado mes de junio, en Madrid, que congregó a más de 1.000 profesionales de todas las comunidades autónomas.

Esta reivindicación se ha trasladado a la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo y a la Presidencia del Gobierno, al Ministerio de Sanidad y a las consejerías de Salud, además de a los representantes de los diferentes grupos en la Comisión de Sanidad del Congreso y del Senado, y a distintas instituciones, como la del Defensor del Pueblo.

SATSE ha instado a los partidos a que presenten en el Congreso de los Diputados y en los diferentes parlamentos autonómicos una moción que inste al Gobierno a propiciar una clasificación profesional justa.

También se han promovido jornadas informativas en las diferentes comunidades, se ha distribuido información en los centros sanitarios y medios digitales, y se ha iniciado una recogida de firmas en Change.org