Laboral

Soluciones para las enfermeras que trabajan en las prisiones

SATSE pide al Gobierno que solucione la indefensión y sobrecarga que sufren las enfermeras que trabajan en las prisiones. Asumen funciones que no les competen sin respaldo legal y en un entorno complejo e inseguro.
Enfermero trabajando en una prisión

SATSE ha trasladado de nuevo al Gobierno la problemática laboral y profesional que sufren desde hace mucho tiempo las enfermeras que atienden a la población reclusa. Tiene su origen en el déficit existente de médicos, el cual todo apunta que va a seguir empeorando.

El Sindicato subraya que las enfermeras tienen que asumir competencias y funciones médicas sin un mínimo respaldo legal y en un entorno especialmente complejo e inseguro por la población a la que se asiste y la habitual gran demanda asistencial existente.

La “confusión competencial” que actualmente se está produciendo por la falta de médicos podría entenderse como una inducción al intrusismo profesional que no se puede tolerar y en el que las enfermeras no quieren incurrir en ningún caso.

Guardias telemáticas

SATSE manifiesta su disconformidad con el Servicio de Guardias Telemáticas porque se ha demostrado insuficiente ante situaciones en las que la enfermera debe realizar la primera atención de urgencia sin demora o cuando se convierte en un simple mediador entre el médico y el paciente.

El Sindicato entiende prioritaria la existencia de protocolos que indiquen claramente la actuación a seguir por parte de las enfermeras dentro del marco legal y de sus competencias.

“Los profesionales de Enfermería se están viendo obligados a trabajar dentro de un marco de dudosa legalidad e incertidumbre profesional"

Se requieren instrucciones, por ejemplo, para la renovación de tratamientos psicotrópicos, revisión de pacientes en tratamiento con terapias sustitutivas de opiáceos, solicitud de pruebas diagnósticas…

Sin protección

El Sindicato advierte que desde la administración no se está protegiendo la salud laboral de estos profesionales. “Se debería vigilar especialmente el estrés, el agotamiento o la depresión derivados de las deficiencias en la organización y gestión del trabajo”, agrega.

En concreto, SATSE apunta algunas de las condiciones negativas que pueden influir en la salud de las enfermeras:

  • Exigencias contradictorias y falta de funciones claras del puesto.
  • Falta de participación en la toma de decisiones,
  • Deficiente gestión de los cambios organizativos.
  • Falta de apoyo y de comunicación por parte de sus superiores.

Vigilancia

Por último, el Sindicato demanda que se garantice que las actividades en contacto con internos se desarrollen siempre en el Módulo de Enfermería, y con presencia de personal de vigilancia, ya que no se les reconoce ni retribuye que su trabajo se realiza en contacto directo con internos, incluso en otros lugares del centro penitenciario.

Se considera, a pesar de ello, asimilado a un trabajo de oficina, mientras que al personal de vigilancia sí se le reconoce, constituyendo esto un agravio que no tiene justificación, concluye.